La parroquia de San Miguel y San Sebastián de Valencia celebró el día de los Files Difuntos con la aportación de jóvenes campaneros que - en ese templo y en muchos otros de la provincia - trabajan para recuperar la tradición del toque manual de campanas, así como mejorar las condiciones de los elementos musicales y su entorno allá en las alturas.
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| Raúl, Carmen y Franciso José en acción |
Els campaners del Barrio de Quart lo forman Raúl Rubio, Francisco José Jódar, Carmen Feliu, Pablo Sayas, y Abel Mondéjar. Estos jóvenes valencianos recuperan el toque de campanas manual en la torre de su parroquia cercana, la de la Iglesia de San Miguel y San Sebastián.
Un grupo de ellos realizó el sábado 2 de noviembre de 2013, en el día
de los Fieles Difuntos, el Toque de Difuntos para las dos misas.
Y para hacerlo más solemne, en el último toque hicieron la señal y
luego la pusieron a medio vuelo -como se acostumbra en los pueblos-incluyendo
la campana grande que se toca pocas veces (hasta el año 2001 lo hacía Vicente
Mesa, que fue el último campanero de San Valero, así como de San Miguel y San
Sebastián de Valencia, además de impulsor de la Asociación Mestres
Campaners; en ella estaban entre otros los maestros Vicente Belenguer
Montesinos y Enrique Martín Diego (que tocaba en San Valero -barrio de Ruzafa-
y fue último campanero tradicional de Valencia).
Raúl Rubio, uno de los jóvenes campaneros, nos ilustra con Un
poco de historia
Las campanas que poseían los frailes eran
cinco, un número habitual en las torres valencianas: San Sebastián; San
Francisco de Paula; Santa María Victoria; Beato Gaspar Bono; San Nicolás. De
todas ellas no conservamos ninguna, ni la misma torre que fue demolida por el
maestro de obras en 1840. Según nos cuenta una también rara relación de
campanas de antes de 1936, escrita por Enrique Pla Soler, este campanar,
contenía tres campanas: Rafaela (por una antigua cofradía, con sede en esta
iglesia), Dionisia (titular) y Miguela (titular). La Parroquia de San Miguel
y San Sebastián es -como sabemos- una iglesia sin campanario. Durante la década
1910-20 se alza la torre modernista que hoy podemos contemplar y en 1927 la
parroquia encarga la construcción de 4 nuevas campanas en 1927, San Miguel (80
arrobas), San Sebastián (60 arrobas), María Desamparados (40 arrobas) y San
Francisco de Paula (20 arrobas), construyendo un juego de campanas coherente y
sin duda "sonoro". También conocemos al campanero que las hacía sonar
con maestría, tocando coros, repiques, vuelos según la festividad: su nombre es
Juan Belenguer Montesinos. A este juego de campanas nuevas hay que añadirle la
"Rafaela", que es la campana más pequeña, sin duda una de las antiguas
del templo de S. Miguel que fue reutilizada. Recordando que se trasladaron las
tres que había en el antiguo templo parroquial, posiblemente las otras dos
sirvieron como metal para el nuevo juego. Poco duraron estas campanas, ya que
en 1936, como tantas otras de la ciudad, fueron desmontadas de sus torres para
usarlas como material bélico. Gracias a Dios, de este antiguo juego aún
conservamos la campana "mitjana", ya que fue recuperada después de la
guerra. Igualmente el "tiple" o campana pequeña que hoy posee la
parroquia, es sin duda una campana del Servicio de Recuperación, que repartió
las campanas que se encontraban almacenadas en el puerto y otros lugares a las
parroquias que no tenían ninguna. Así pues, el juego que hoy tiene la parroquia
es el siguiente: Sebastián 1927 y de 730 kg dando cara a la Plaza; Amparo 1956 y de 260 kg que hace de mediana y
da cara al tejado; Mercedes 1915 y de 110 kg y da cara al Jardín Botánico. Las tres
campanas aún mantienen su instalación tradicional (con las "truges"
de madera) estando mecanizadas sólo en el repique y no en el volteo.
Vista con las Torres de Quart al fondo
Más fotografías de la tarde de Difuntos con Campaners del Barri de Quart en este enlace:
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